¿QUÉ NOS ENSEÑA LA LUNA NUEVA?

¿QUÉ NOS ENSEÑA LA LUNA NUEVA?

Cada fase de la luna nos acompaña en este viaje que se repite una y otra vez, y así como la luna cambia de fase, también va cambiando nuestra energía y en cada fase, sin importar si tenemos útero físico o no, o incluso cuando ya no está presente la menstruación a causa de la menopausia; nos reencontramos con cuatro mujeres que nos rigen arquetípicamente.

Cada arquetipo es un modelo que se encuentra dentro del inconsciente colectivo y nos permite saber la forma en que nos relacionamos con nosotras mismas y con nuestro entorno; estos modelos o arquetipos, se relacionan también con las fases lunares y nos permiten comprender la energía de cada fase del ciclo. Conocer a tus mujeres te ayudará en este transitar de la vida cíclica.



Comencemos reconociendo a la Luna Nueva.
La Luna nueva es la fase en la que la Luna no refleja luz y no es visible desde la Tierra, por eso es que algunos la llaman luna oscura o luna negra. Haciendo la correspondencia con el ciclo femenino, en su etapa fértil, a esta fase se le asocia con la menstruación o más específicamente con los días donde se presenta el sangrado.

En esta etapa nos encontramos en la introspección total, físicamente necesitamos más descanso que de costumbre, nuestro cuerpo comienza a tornarse pesado, el vientre se hincha al igual que los senos, en fin, nos preparamos para la transformación, y no me refiero a transformarse en un sentido negativo, entre más nos conectamos con nuestro ciclo aprendemos a ver esta fase en todo su esplendor y con todos las ventajas que puede aportar a nuestra vida, pues es un momento de total conexión con nuestro ser, con la energía interna donde convive el subconsciente y la intuición, donde es verdad que estamos más sensibles, pero también más abiertas a experimentar nuestra psiqué a flor de piel, donde nuestros sentidos se agudizan y estamos más cerca de nuestra naturaleza salvaje e instintiva, donde el contacto con el exterior puede parecer difícil de sobrellevar, porque algo muy dentro de nosotras nos está llamando a mirarnos a nosotras mismas, esa voz interior está clamando por ser escuchada invitándote a la renovación. 


Si bien el proceso biológico es que con el sangrado se desprende el endometrio de la pared vaginal, energéticamente con este desprendimiento también estamos dejando ir todo aquello que ya no necesitamos en nuestra vida. En el caso de que el óvulo haya sido fecundado, el endometrio será lo que nutra al bebé, en caso contrario, el endometrio se desprende dando como resultado la menstruación, esto quiere decir que la sangre es un líquido preciado que lejos de ser un desecho es una elixir lleno de nutrientes y células , cuya función era dar soporte al feto, por eso es que en la antigüedad la sangre menstrual era utilizada por las mujeres sabias para sanar. En la actualidad se está retomando esta sabiduría y se habla acerca de la siembra de la sangre que es un acto simbólico donde la sangre menstrual es depositada en la tierra a manera de ofrenda por lo mucho que nos nutre la Pachamama, es devolverle un poco de lo que ella nos da y completar un ciclo de energía, pues de ella venimos y a ella volvemos.



En la actualidad la menstruación ha perdido este sentido mágico, pero está en ti recuperar la sacralidad que existe en este ciclo de vida-muerte-vida, está en ti volverte a conectar con tu feminidad y encontrar tu propio ciclar armónico, pues una vez que lo descubres este te acompaña como un aliado en este bello camino del despertar femenino.

Ahora les comparto unas líneas de los libros Luna Roja y Las cuatro fases de la luna roja de Miranda Gray.

Las palabras clave para ubicar esta fase son:

Oscuridad /Hécate/ semilla/ Perséfone/ útero/ invierno/ unidad/ potencial/ tierra/ cueva/ luna nueva/ visión/ profecía/ sabiduría/ renovación.

Algunas estrategias para fluir en esta fase:

• Alterar tu rutina para incluir más tiempo de descanso, incluso permítete faltar al gimnasio por un par de días.
• Meditar o simplemente descansar en silencio en un entorno natural de preferencia.
• Evita tomar decisiones importantes.
• Reflexionar sobre las cosas que te molestan durante otras fases, pedir a tu subconsciente que te traiga el mensaje y la solución.
• Confiar en tu sabiduría interior y tus decisiones de cambiar durante esta fase, la información provendrá de lo más profundo de ti, lo cual te ayudará a comprometerte.
• Hacer cosas que te hagan sentir mejor… por ejemplo un baño por la noche con aceites de aromaterapia, velas, música y chocolate.
• Concédete permiso para reducir tu ritmo. Hacer lo necesario, pero no más. Ya podrás ponerte al día más adelante.
• (En el trabajo) Delegar en la medida de lo posible, pero sólo en personas en las que confíes plenamente.
• Simplificar, no asumir demasiadas tareas al mismo tiempo.
• Ayudar a los demás dándoles pautas sobre cómo aproximarse a ti o dejarte tranquila. No esperar que te lean la mente.

Aprende a reconocerte en cada una de tus mujeres y tendrás a la mano las potencialidades de tu ser.


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Mujeres de la Tierra.
*Tu equilibrio en los ciclos de la naturaleza*

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